La axiología
y su objeto de estudio
Se
entienden a la axiología como el discernimiento de los valores y bienes
supremos que animan y legitiman a la educación superior, los cuales deben ser
expresamente contemplados tantas veces como se proceda a la formulación o
reformación de sus fines y compromisos prioritarios. De manera señalada se
refieren a los principios éticos y normas morales que deben regir la práctica
educativa.
La axiología
en la pedagogía
Esta
tiene la tarea de realizar en el educando bienes culturales ( se entienden
estos valores como de justicia y amor etc.) lo mas del mejor modo tomando en
cuenta condiciones sociales de la cultura humana. La ética de la pedagogía
tiene el papel de hacer valer en la enseñanza los valores morales y jurídicos,
tales como la verdad, equidad, justicia, etc. La educación es una aspiración,
el aspirar implica una decisión, del hombre y para ello un acto electivo. El
hecho de que el hombre elija algo, obedece a que el sujeto le otorgue cierto
valor, quien pretende justificar un ideal pedagógico, ha de partir de lo que se
estima, valora, teniendo un criterio sobre lo bueno, lo mejor, lo optimo, la
axiología o teoría de los valores confronta delicados, difíciles y variados
problemas.
La
estructura y la vivencia de los valores
La
estructura del valor se compone de ideas de finalidad de una gradación, una
polaridad, una materia y una jerarquía. Todos estos elementos del valor
constituyen una estructura, cada uno de ellos forma parte de un todo. La
vivencia de los valores se da cuando no tiene conciencia al realizarlos.
Existen dos doctrinas acerca de la conciencia de los valores:
1. El emocionalismo, la cual se
apoya en los valores que son captados por las emociones o la razón de los
vehículos de los valores.
2. El intelectualismo que
consiste en tener la vivencia de una situación axiológica educativa. Este solo
puede producirse por medio de la razón.
Dentro de
la jerarquía de los valores encontramos que los valores pueden ser primarios
los que son para la seguridad de la vida orgánica del hombre (salud, fuerza,
energía, destreza física) y los valores llamados hedónicos que son aquellos que
le suministran placer al hombre (alegría, regocijo, etc.) y los valores económicos
que son producto de la riqueza, en ella reside el valor de utilidad. Además de
los valores de conocimiento científico, morales, estéticos, eróticos,
religiosos y místicos.
La pedagogía
axiológica en la educación
Los
bienes culturales se transforman en bienes educativos dependiendo del momento y
del educando, la educación como campo de la cultura permite trasmitir a la
comunidad hacerla un patrimonio aun mas permite nuevas creaciones. Los tipos
históricos de la educación se forman dependiendo de los ideales de una sociedad
y en cierta época. La formación humana permite al hombre superar su nivel de
vida, es decir, adquiere una nueva forma de vida. La formación humana se
adquiere al asimilar contenidos y es obra personal.
Premisas axiológicas
en la educación física
En el
terreno de los valores y bienes culturales fundamentales, es necesario resaltar
de entrada el singular e intransferible puesto que ocupa la educación en el. De
todas las instituciones y actividades sociales es esta la que encarna de la manera
más patente e inequívoca el conjunto de valores que dan sentido a la condición
humana.
La
educación no solo es portadora o trasmisora de valores: ella en si misma
constituye una materialización de valores; estos se hayan condensados y
articulados en cada uno de sus funciones sustantivas. Entre estas y aquellos
hay algo más que una relación o convergencia. Se trata de una unidad originaria
e indiferible, cuya fractura implica la anulación de ambos términos: al margen
de los valores dichas funciones perderían su poder formativo y se convertirían
en vínculos de adiestramiento mecánico y dictorial; sin ellas los valores
quedarían confinados en su realidad, no conseguirían penetrar en la trama
objetiva y subjetiva de la vida social ni arraigar en el comportamiento de los
individuos. Merced a esta unidad esencial, la producción, la enseñanza y el
aprendizaje de conocimientos llegan a conformar un autentico proceso
humanizador.
Si toda
acción educativa es un ejercicio de valores, la educación superior es estadio
en que dicho ejercicio abarca de manera explícita la constelación entera de
valores morales, civiles y culturales que dan sustento al comportamiento
individual y colectivo. Hoy más que nunca, dada la magnitud de los problemas y
retos que enfrenta nuestro país, es indispensable acentuar este perfil
axiológico en todas etapas y actividades de la formación profesional. La
excelencia académica, la integridad personal, la conciencia moral y el
compromiso social deben dar paso a un nuevo género de profesionales.
Es
necesario tener presente en todo momento que los valores, merced a su
naturaleza propia, no pueden ser reducidos a contenidos temáticos puntuales. Es
necesario evitar confundirlos con una serie de reglas o de enunciados
prescritos. En efecto, los valores no son un objeto de enseñanza, se difunden
atreves de la enseñanza de todo objeto. Su asimilación entraña el desarrollo de
la consciencia reflexiva y de la voluntad propia, que dan lugar al
comportamiento libre y autónomo. Mientras los preceptos y las normas señalan
acciones particulares que han de realizarse obligatoriamente en circunstancias
y momentos determinados, los valores se ofrecen como fines y directrices de
alcance ilimitado, a cuya luz los individuos pueden decidir por sí mismo el
rumbo de su conducta en cualquier tiempo y situación convirtiéndose así en
verdaderos sujetos autoconscientes.
Dada la
relación sustancial que mantienen con el comportamiento humano y la naturaleza
integral de este, los valores implican entre sí lo mismo en cuanto a su
concepción que en punto a su ejercicio.
Muy buena
ResponderEliminarBuen aporte a nivel de educación superior....
ResponderEliminarpodrias comentar de que libro sacastes la informacion
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